Mucha gente se pregunta si hay alguna verdad en los dichos. Yo podría confirmar que sí, no hay ni un dicho sin algún argumento. Por esta misma razón, por lo que nos ocurre, bueno o malo, le buscamos explicación. Es cierto lo que dicen los antiguos chinos que no dura para siempre ni la gran felicidad, ni la gran desgracia. Lo estamos comprobando día a día...
Y llegamos a pensar en los lazos del destino, en aquel hilo rojo que une a las personas destinadas, entrelazadas de nacimiento. Las que se buscan sin darse cuenta de esto, las que se atraen a través de las distancias y el tiempo. Las que incluso rompen las barreras de lo lógico con una única razón - llegar hacia la otra punta de aquel hilo rojo que las une.
Con lo mucho que se enrede el hilo, con lo mucho que se estire, nunca se romperá. Ni siquiera si los dos destinados uno al otro quisieran cortarlo.
Y llegamos a pensar en los lazos del destino, en aquel hilo rojo que une a las personas destinadas, entrelazadas de nacimiento. Las que se buscan sin darse cuenta de esto, las que se atraen a través de las distancias y el tiempo. Las que incluso rompen las barreras de lo lógico con una única razón - llegar hacia la otra punta de aquel hilo rojo que las une.
Con lo mucho que se enrede el hilo, con lo mucho que se estire, nunca se romperá. Ni siquiera si los dos destinados uno al otro quisieran cortarlo.
¡Qué bonita la entrada! Totalmente de acuerdo. Mi abuela siempre decía: "El hombre que sea para ti, por mucho que intentes alejarlo, siempre volverá."
ResponderEliminarwww.inquietudesterrenales.blogspot.com
Cierto, Oana! El destino es muy sabio.
ResponderEliminarCreo en esta leyenda pero estoy tan segura de que no existe ningún hilo rojo tan segura como de que algún día voy a morir
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