Qué serían los jardines del Edén
sin el frescor del agua purificante?
Sin su sonido, susurrando eternidad,
y sus gotitas en el aire bailando...
Lleno mis manos de este elixir
para sentirme de nuevo pura,
para volver a ser de nuevo
aquella niña que ya ha crecido.
©Nadezhda Petkova Kostadinova, 2015
Fotografía: Juan Pérez de Lema
No hay comentarios:
Publicar un comentario