Extendí mi mano para acariciarte
y lo que hiciste fue besarla
con esa ternura que sólo tú tienes,
un ser tierno y sensible, escondido
debajo de una coraza de apariencias.
Cerré mis ojos para poder sentirte
con cada poro de mi piel sedosa,
con cada rinconcito de mi alma.
©NadezhdaPetkova Kostadinova, 2015
Todos los derechos reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario